viernes, 27 de abril de 2012

Que mala pata

Hace ahora poco más de un mes me fracture la tibia y el peroné, llegados a este punto puedo asegurar y aseguro que es una experiencia cuanto menos poco recomendable que por el momento poco me ha enseñado: sigo siendo una paciente malísima y sigo odiando las agujas que apuntan en mi dirección, sigo siendo cabezota y exagerada. Seguiré montando y es probable que algún día me vuelva a caer. Sigo siendo díscola y sigo odiando depender de otro para poder hacer algo.

Pero, ¿Algo habrás aprendido no?
Hombre claro, que lo que yo siempre había llamado muletas se denominan en realidad "bastones ingleses". Las muletas son las que utilizan los americanos en las películas o en los dibujos animados y que se colocan en la axila.

¿Cómo te quedas eh? ¿A que tu tampoco lo sabías? Pues eso que te llevas aprendido.

Experiencias de la vida. Siempre tan enriquecedoras.