lunes, 29 de abril de 2013

Tú mismo

Bueno amigos, aquí viene un briconsejo de sociología; ¿Quien no ha tenido en casa una bronca sin saber de dónde ha venido? o ¿Una novia con cara de perro un mes entero sin saber por qué?

Bueno, una vez abandonado el acento de Bilbao, en esta entrada me dirijo a todos los chicos que podáis leer esto y que por X o por Y alguna vez os habéis topado con un "tu mismo" sin saber muy bien que hacer.

Sólo dos palabras, poco continente para tanto contenido

Cuando un mujer dice "tú mismo", "tú veras"; "allá tú"; "como quieras" (como veis la lista es amplia) al contrario de lo que el 95% del género masculino pueda pensar, no quiere decir que vuestra decisión le de igual, que podáis hacer lo que consideréis oportuno, que confía en vuestro criterio...(perdonad que con esto último me de un poco la risa...)
Lo que realmente quieren decir esas dos palabras (acompañadas de todo un cortejo de signos faciales y posturales  es que la única forma de salir de esa situación agradandola es hacer/decir lo que ella espera que hagas. Pero, como todavía parece fácil, estas dos palabras añaden un plus de dificultad y peligrosidad: no piensa decirte que es lo que espera que digas/hagas.
Bien es cierto que, como es una mujer, habrá dado a lo largo de meses/años pistas de lo que espera de ti, de lo que le gustaría que hicieras, lo que necesita... pero como eres un hombre, ni las habrás visto pasar. Así que una cosa con otra se anula, y partimos de cero con el "tu mismo".

¿Retorcidas? quizás, no voy a decir que no.

Bien, "reconozco la escena" pensarás, pero "¿Qué hacer ante un "tu mismo"? te estarás preguntando, pues bien durante años el hombre ha ansiado conocer la respuesta a esta cuestión sin demasiado éxito, pero como poseedora de una X más que vosotros os diré que ante un "tu mismo" de manual sólo caben tres posibilidades:

A. Ser el hombre perfecto. Fácil verdad?
    Una forma de salir de esta situación es ser todo lo que ella espera de un hombre de manera innata. Hasta
    ahora estos hombres sólo se han criado en cautividad como resultado de películas o series de televisión.
     En cualquier caso, todavía no hay ningún caso real documentado.

B. Jugársela.  Normalmente con un 50% de probabilidades de éxito. Te recomiendo que si te decides por esta opción trates de hacer todo lo contrario a lo que tu piensas que deberías de hacer, esto hará que aumenten tus probabilidades de éxito.

Y por ultimo, mi recomendación personal:

C. Sal corriendo.


Bienvenidos a la primavera amigos, 
Aaaay, que bonito es el amor ¿no?