Me habia dicho a mi misma, en repetidas ocasiones, que esta entrada la dedicaría al fin de los exámenes. Pero he aquí una reflexión más interesante.
Muchas personas no son conscientes de esto que voy a contar, y lo que se ve en la calle es la prueba irrefutable, pero...
En carnaval, la línea que separa a un disfraz divertido y ocurrente de la perpida total y absoluta de la dignidad humana es tan fina que en algunos casos pasa inadvertida.
Veamos, en todo carnaval podemos encontrar niños pequeños forrados hasta la lengua, normalmente vestidos de algun animal polar o en su defecto pollos.
Muy socorrido, quien no ha visto un niño pollo.
De este modo la preocupada madre saca a su hijo de apenas un año a la calle en febrero a 3 ºC quedando su conciencia intacta aunque el niño mee cubitos en el pañal.
Por otro lado estan los niños algo más mayores que visten siempre de forma bélica con muchas espadas, lanzas, escudos pistolas. Siempre listo para una gran masacre.
Las niñas, normalmente objeto de los atentados de estos pequeños monstruos armados, sienten predileccion por los vestidos de princesas disney.
Bien alto aqui.
¿Por qué los disfraces de princesas disney no se parecen jamas al que llevaba la princesa en cuestion en tu pelicula favorita?
Tu te quieres disfrazar de bella, y acabas pareciendo una cascara de platano arrugada hecha con una tela aspera y con menos vuelvo que un avion de papel hecho de plomo.
No digamos ya si quieres disfrazarte de pocahotas. Porque las tiendas de disfrazaces o tu madre tienen una version muy distinta del simpatico y descocado vestidito de la nativa americana.
Una version que incluye un jersey de punto debajo. No dire más.
Dejando de lado traumas de la infancia, seguire con mi particular análisis.
Llegamos a la adolescencia, bella etapa en la que lo chicos solo conciven un disfraz posible:
de puta.
Se ponen una falda, unas medias de rejilla, se pintan los morros y se ponen una peluca mal peinada que al final de la noche ya no llevaran, pasando su disfraz de puta a Rosi de Palma en cuestion de segundos.
Probablemente lo peor de este disfraz esque para ello piden la ropa a sus madres o novias con la escusa de: "esque me voy a disfrazar de puta"
No hace falta ser demasiado listo para leer el mensaje subliminal de la frase.
Las chicas, por lo contrario, no sienten la imperiosa necesidad de cambiar de sexo, pero si de reafirmarse en el propio.
Pueden disfrazarse de cualquier cosa, da igual, pero tiene que llevar detras la coletilla "sexy"
veamos esto con varios ejemplos:
Enfermera sexy
Secretaria sexy
Policia sexy
etc
una vez han terminado con el campo de las profesiones, tiene una regresion a la infancia, pero una regresion sexy:
caperucita roja sexy
blancanieves sexy
Bella sexy
Jasmine sexy
etc...
En cualquier cacos volvemos a lo mismo, los disfraces de princesa disney jamas se parecen a los de las peliculas.
Unas veces por exceso de ropa, otras como es el caso, por defecto.
Creo que si de pequeña hubiera visto la blancanieves que vi el sábado pasado me hubiera replanteado el cuento, y el papel de todos los enanos.
Una adolescente puede llegar a convertir en sexy un disfraz de pollo si asi lo requiere la situación.
No me preguntes como, pero sucede.
Por último, pero no menos terrible, llegamos a la edad adulta. Y digo adulta por la edad fisica, que no mental.
Quiero hacer desde aqui un llamamiento a la poblacién en general (aprovechando que me lee tanta gente claro..)
Un adulto disfrazado de bebe NO es un disfraz gracioso.
imaginad por un momento que salis de fiesta y encontrais a vuestro padre, el que os dio la vida, el que os ha educado y regañado el que se ponia firme el protagonista de la maternal frase " a que llamo a vuestro padre" con un babi azul, unas pecas y coloretes pintados en la cara y un chupete del tamaño de una patata.
¿Os hace gracia?
ami tampoco.
Los adultos y el carnaval son algo muy peligroso que con frecuencia dejan a la luz la falta de amor por uno mismo y consideracion de la dignidad propia.
Pero mi pregunta es...
¿Por qué?
y esta es la gran respuesta:
Por que es carnaval, tiempo de hacer lo que uno quiera como quiera.
Adelante entonces.
Magnifico es poco! muy ameno y entretenido, me encanto Marta.
ResponderEliminar1beso
Creo que si de pequeña hubiera visto la blancanieves que vi el sábado pasado me hubiera replanteado el cuento, y el papel de todos los enanos.JAJAJAJAJAJAJAJA!
ResponderEliminarAhí tienes toda la razón. Mi trauma personal, desde que me fui gracias al erasmus de la verde cantabria hacia otras tierras, he dejado de bailar la macarena. Ellas también consiguieron hacer sexy ese baile; ahora me da miedo.
(y ahora las letras al firmar son un poco más legibles)